Hay frases que suenan fabulosas pero que, cuando te pones a pensarlas, no tienen mucho sentido.
Hay consejos que hacen más mal que bien, si realmente los analizas, y oraciones que quedan preciosas sobre fondos de puestas de sol, pero que no quedan tan preciosas bajo un filtro crítico de esos que no vienen en Instagram.
Sin ir más lejos, Umberto Eco (sí, otra vez Eco) afirma que algunos aforismos reconocidos son en realidad «enfermedades del ingenio»*: son aquellas máximas que pueden invertirse sin que la frase pierda lógica.
Esperad, esperad, que os lo explico con ejemplos. Este que pone Eco me divierte:
La gente sería feliz si los reyes filosofasen y los filósofos reinasen.
(Plutarco).
Tiene sentido, ¿verdad? ¡Necesitamos gobernantes inteligentes, gente que piense!
El día que quiera castigar a una provincia, haré que la gobierne un filósofo.
(Federico II).
¡Es que esto también parece cierto! Para llevar a cabo la tarea de gobierno no basta con pensar y especular. ¡Hay que decidir con rapidez! ¡Hay que actuar y conseguir que los problemas se solucionen de inmediato!
Como veis, son dos frases que en principio parecen tener razón. Y sin embargo son contrarias, porque ambas son reducciones simplistas de una realidad compleja.
El mundo está lleno de mitos, conceptos complicados que intentamos simplificar y palabras como bizarro, que no significa lo que crees.
(Solo que ahora resulta que sí significa lo que crees).
Como aquello de que para ser escritor de verdad tienes que «buscar tu voz».
La leyenda de la voz mágica que unge al escritor
Aquí dejo otras variaciones:
- “Tienes que encontrar tu voz”.
- “La voz es lo que te define”.
- “El verdadero escritor conoce su voz”.
- “Busca una voz única, original”.
Generalmente son frases que acompañan a otras como:
- “Si haces lo que amas, no trabajarás un solo día de tu vida” (imagino que esto se refiere a que estarás en el paro).
- «Para triunfar como escritor lo único que tienes que hacer es escribir” (y sin embargo hay gente ahí fuera con veinte novelas en Amazon de los que nunca hemos oído hablar).
- «Si deseas algo con mucha fuerza, el universo conspira para concedértelo” (lo sé, me repito. Cualquiera que visite mi blog sabe que esta es una de mis frases favoritas ever).
Y me imagino a hordas de autores con redes de esas cazamariposas y un buen machete, atravesando la selva de la escritura pura, artística y pasional, en busca de esa voz tan elusiva, inspirados por la llamada irrefrenable de la motivación.
De pequeños, antes de que sus padres les den permiso para visitar el Amazonas, los verdaderos escritores buscan su voz en la jungla urbana.
A Eco le gustan más las paradojas que los aforismos que encierran verdades a medias y reconozco que a mí también. La paradoja expresa ideas contrarias, pero a la paradoja no se le puede dar la vuelta. Es una manera fantástica de concebir la realidad tan complicada y sutil que nos rodea.
Propongo hoy una paradoja. Habrá filósofos en la sala (perdonadme el ejemplo anterior, seguro que gobernaríais de maravilla) y podréis corregirme, pero esta es mi propuesta. Igual, más que una paradoja, es un juego de palabras que encierra, también, una realidad complicada:
Suele ocurrir que cuando buscas tu voz no la encuentras y que la encuentras cuando menos la estás buscando.
(O, por lo menos, cuando no estás buscándola de manera consciente).
Yo también he creído en sentencias absolutas y verdades universales, con el dichoso cazamariposas o como se llame (ya veis, me considero escritora y no sé cómo se llaman las cosas) y me encantaría volver atrás en el tiempo y darme un par de bofetadas (o cachetes en el culo, pero esa es otra historia y por favor no me preguntéis nunca por ella).
Lo primero que me gritaría, creo, es: “¡Deja de jugar tanto al WoW!”.
¿Quién necesita una vida pudiendo ser un orco gigante con pectorales, pelazo y un gran... hacha?
Aunque tampoco me haría mucho caso. Mi orca molaba. Y mi tauren. Y mi no muerta. A lo mejor mi yo pasado haría más caso a mi yo futuro si me hablara de la música.
¿Qué tiene que ver la música con la voz del escritor?
Desde que recuerdo, para mí la escritura ha sido algo musical. Siempre me ha interesado más la forma de contar las cosas que lo que se cuenta (aunque esto es muy importante, claro). A veces leía textos que sonaban como música en mi cabeza y que me producían una especie de relámpago de placer. Y siempre he buscado reproducir esa música en lo que hago. Supongo que por eso empecé con la poesía, por su carácter rítmico y melódico.
Esa es mi experiencia, para vosotros la plasmación de la experiencia artística será otra.
No me extraña que se idealice tanto la noción de la voz. Porque hay algo mágico, místico y sobrenatural en el momento en que todo se coloca en su sitio, el cerebro se reajusta y hace un chasquido peculiar y de repente todo se coordina con la música. Pero por una vez es tu música, de nadie más.
Y es ahí donde creo que está el error: esa voz no es solo tuya, es la de todo el mundo. Proviene de todo lo que has bebido, leído, consumido, escuchado, solo que ahora de repente funciona, significa algo. Estás subido/a a hombros de gigantes y de repente tu culo está cómodo, se ha hecho hueco y las vistas son… wow (no confundir con WoW, que me engancho de nuevo), las vistas son brutales.
Una compañera escritora me comentaba hace poco que tenía el problema de que cuando leía, la forma de escribir del autor al que leía se le metía en su propia escritura. Yo creo que eso no es malo. De forma consciente o inconsciente, imitamos a otros mil veces antes de tener el bagaje suficiente de voces, estilos y experiencias como para que de ello salga algo conjunto, propio, que pueda identificarse como nuestro.
Cuando eso por fin sucede, sí, es mágico.
Pero no porque te inspiren las musas ni porque te hayas drogado ni rezado muy fuerte a ese universo conspirador, sino porque has escrito tanto y leído tanto que has encontrado una manera de expresarte tú, sin censura ni bloqueos. Has compuesto por fin esa canción que lleva siglos sonando en tu cabeza.
Deja de buscar tu voz y deja de preocuparte por ella. Vendrá, cuando tus horas infinitas de lectura y escritura cristalicen en algo que alguien lea y diga: “Esto lo ha escrito Juancho Pérez, ese de los libros de vampirismo romántico-gore. Es imposible que lo haya escrito otra persona”.
Maneras indirectas de acelerar tu encontronazo mágico con esa voz de la que tanto hablan
Todo esto no quita que haya algunos métodos para que tu escritura cada vez esté más definida.
Aviso: Ninguno es sencillo ni puede realizarse en cinco minutos. Si buscáis soluciones fáciles, tenéis mi permiso expreso para salir de esta página:
Todos los teclados deberían venir con este botón incorporado.
Sí, la red está llena de trucos y hacks que os darán todo lo que deseáis y más (¿qué estamos haciendo que no somos todos ya millonarios ociosos, viviendo en las Seychelles?). Seguro que habéis oído hablar de otra web bastante más interesante y popular que la mía. Os dejo ahí el enlace, por si acaso:
Para los que tengáis ganas de trabajar, ya sabéis cómo se resume esto: en leer y escribir mucho. Pero no de cualquier manera.
1. Asegúrate de que tus lecturas son variadas y de diferentes sectores
¿Qué voz propia vas a desarrollar si solo lees novelas de Agatha Christie? Tu voz será la de Agatha Christie, y bastante escribió ya la mujer para que vengas con tu remake (más políticamente correcto, eso sí) de Diez negritos. Cuantas más cosas diferentes leas, más variada será tu influencia, más las voces que te marquen y más compleja tu propia expresión.
2. Aprende a hacer lo básico antes de ser megaoriginal
Creo que todos escribimos nuestras primeras novelas queriendo hacer algo diferente y revolucionario, original. Y lo gracioso es que no sabemos ni contar una historia facilona, ¿cómo vamos a contar una difícil? Antes de escribir una pentalogía de novelas río, aprende a escribir un relato. Antes de saltarnos reglas de ortografía y gramática, aprendamos cómo funcionan.
3. Dale al blogging
Sé que quita mucho tiempo y puede ser muy frustrante si no tienes interacción ni seguidores, pero creo que es una de las mejores prácticas que existe para un autor, escriba lo que escriba. Un blog que funciona tiene que saber cómo enganchar a su público (igual que una historia de ficción), y la escritura continua de artículos acaba por darte una perspectiva muy especial sobre cómo manejar el ritmo dentro de diferentes formatos. Creo que mis grandes momentos de “clic”, de descubrimiento y encaje en mi escritura de ficción, han sido cuando más activa estaba con el blog.
Algunos escritores hacen lo mismo con Wattpad: utilizan una creación persistente con retroalimentación constante para reconocerse, para definirse. Tengo sentimientos encontrados con Wattpad (no me gusta enseñar algo que no esté por lo menos un poquito pulido, y el feedback de plataformas de ese tipo no es siempre útil), pero imagino que sus efectos a largo plazo, si se combina con otro tipo de escritura, podrían ser útiles. Me encantaría saber vuestra opinión respecto a esto.
4. Escribe con otra persona
Para encontrarse a uno mismo a veces hay que perderse. Y nada hay como escribir a cuatro manos para aprender a limar un estilo, a destruir el ego en busca de un estilo uniforme. En el fondo, estás buscando otra voz: una voz conjunta, pero esta te ayuda a eliminar asperezas y a reconocer con más claridad tu propia melodía. Desde que escribo con José Antonio noto que mis textos en solitario tienen mucha más personalidad, como si quisiera resarcirme, liberada.
Para mí, estas cuatro cosas me han traído la voz envuelta en papel de celofán y con un lazo, aunque sé que cambiará, que evolucionará (eso es algo que tampoco te cuentan: que la voz no es estática. Si lo es, hay peligro de estancamiento). Mis lectores dicen que me oyen, que reconocen un texto como mío, y sé que por mucho que yo aprenda y cambie (que me queda mucho mucho por aprender), seguirán haciéndolo.
O tal vez me engañan, y eso no sea más que un sueño, una quimera, otro aforismo reversible de enfermedad ingeniosa e ingenio enfermo.
*(Porque Eco era brillante pero también tenía se ponía un poco chulito a veces).
**La imagen del orco es fanart de Lucas Salcedo. CC BY-SA 3.0, via Wikimedia Commons.
¡EXTRA! Puedes elegir cómo sigue este artículo. ¡Así es, puedes elegir tu próxima aventura!
- Si a ti lo que realmente te preocupa no es la escritura, sino la corrección, ve a la página 42, que te dará la respuesta para todo.
- Si con el blog no tienes bastante y quieres más (como, por ejemplo, artículos que en esta web no salen), ve a la página 7.
- Si quieres apuntarte a una lista de correo que SOLO es para lectores de género fantástico, ve a la página 13.
- Si quieres apoyar mi trabajo haciéndote mecenas en Patreon, ve a la página 56.
- Hagas lo que hagas, jamás vayas a la página 100.
Gracias por tus entradas que son como una bofetada al positivismo tóxico en el que cada vez me veo más envuelta. Me devuelves a la tierra, pero sin hundirme en ella de un capón.
Hace un par de días, desde que estoy metida en el NaNoWriMo me he dado cuenta de mi estilo y de mi voz. De que en mis relatos escribo frases cortas con muchos puntos. Me gusta pisar el acelerador, frenar y marear un poco la perdiz. A veces pienso que es malo y otras que es bueno. Mi ego se tambalea según qué día. Supongo que me visualizo a mi misma como un director de orquesta haciendo aspavientos con la batuta durante la parte central de la obra.
Me han gustado mucho los consejos, y creo que didcarse al bloggin es muy acertado.
El punto dos es brutal. Yo tengo una idea para una meganovela rompedora de fantasía. Pero no quiero que sea mi primera novela porque me dolería en el mundo gastar una idea que pienso que es buena (lleva dos años en mi cabeza, igual mañana me parece una mierda) y chafarla porque aún no sé contar historias de nivel básico.
Las lecturas variadas son una obligación. Hay que empaparse de todo y como bien dices, no hacer remakes.
Fantástico artículo Gabriella. Una vez más, gracias.
Pues me ha parecido muy interesante el artículo. Yo estoy deacuerdo en que hay que tener un estilo propio, pero no creo que sea algo que haya que buscar. Pienso que es algo que sale con horas de escritura y lectura.
Como bien dices, hay que tener variedad de lectura, captar lo que mas nos gusta de cada escritor y adaptarlo a nuestro «estilo».
Yo llevo años escribiendo, a ratos, y admito que mi primer fallo fue intentar ser megaoriginal con un intento de novela de fantasia. Aunque si que es verdad que tengo variedad de lectura.
El tema del blog, lo intenté una vez, a modo de diario escrito por el detective protagonista de mi segunda novela, pero duró poco. El tiempo que usaba en el blog me lo quitaba de escribir en la novela. Así que acabé dejandolo. Aparte no había mucho feedback por el poco movimiento de mis RRSS.
Y lo del tema de escribir con otros escritores, pues es algo que nunca me había planteado, pero parece una buena idea para definir estilos.
Gracias por el artículo y estaré mas atento al blog, que me parece muy interesante.
Que sepas que he soltado una carcajada con lo de Google mientras esperaba a mis hijos en la puerta del cole y todos los demás padres me han mirado (un poco indulgentemente, eso sí, soy la pirada de siempre).
A escribir se aprende escribiendo, siempre me repito ese lugar común. Creo que la voz propia se encuentra cuando dejamos de imitar a nuestros autores favoritos.
Por otra parte, no podría, lo lamento, escribir a cuatro manos, soy demasiado maniático con eso: lo hago a mi ritmo, en el orden que me da la gana y sin pedir demasiadas recomendaciones en el proceso.
Saludos.
Otro artículo que me encanta por el enfoque «diferente» que le das al tema de la «voz del escritor». Ya es un clásico, pero te lo repito: me divierto y aprendo mucho leyendo tus artículos.
Nunca me había planteado cuál era mi voz, hasta que empecé tomarme en serio lo de escribir todas esas historias que habitaban en mi cabeza. Y descubrí que tengo dos voces: una, a la que llamo «seria, oscura, profunda» y que habla cuando escribo temas de suspense o drama; y otra más animada, irónica, ágil, que habla con textos más «alegres». Soy ambas voces, porque me reconozco en ellas y no sabría decirte con cual de las dos me quedo. ¿Es mi voz bipolar?, ¿descubriré algún día en mí una tercera voz?
Y sí, leer a diferentes autores enriquece nuestra voz. Es como cuando degustamos nuevos platos, que acabamos enriqueciendo nuestro paladar.
Por cierto, soy fan de tu voz 😉
Llevo varios días que no paro de encontrarme textos desafiando asunciones comunes, supongo que la red quiere decirme algo. Muy interesante, como siempre, y muy útiles los consejos que apuntas.
Hola Gabriella,
Me ha encantado el artículo. Para los novatos, como yo, los cuatro puntos finales son muy importantes. En especial me ha gustado mucho el punto dos, hay que aprender a escribir cosas sencillas antes de enzarzarse con algo complicado (entre otras cosas porque las “cosas sencillas” a veces no son tan sencillas como parecen, jejeje).
Respecto al punto tres… yo estoy en la red social Wattpad. A veces hasta da miedo decirlo porque la gente la pone a parir con argumentos como: que si los lectores que hay son quinceañeras (¿qué tiene de malo?), que si es para “niñas” (punto del que prefiero no hablar porque me hierve la sangre), que la gente que hay no sabe escribir (normal, la media de edad es muy joven) etc. En mi opinión, creo que es una red social más donde los jóvenes pueden comenzar con un hobby que les gusta. A mí, personalmente, me pasa lo mismo que a ti, prefiero tener algo un poco pulido antes de subirlo. Ahora bien, creo que Wattpad permite que la gente joven no se sienta tan intimidada a la hora de subir lo que escribe y si se les escapa una falta o un fallo gramatical no sea tan grave y no se les eche todo el mundo encima. De todas formas yo he visto de todo, desde escritos que son imposibles de seguir y leer, hasta historias muy buenas.
Por otro lado, yo sí que creo que subir tus escritos a Wattpad te aporta un feedback sobre lo que escribes. Es cierto que no te van hacer un estudio de la novela y que la gran mayoría de las veces te encuentras con un “me encanta” o «no me gusta» y punto. Pero también puedes ver el número de veces que se lee y si es votada o no. Esto te permite hacerte una idea de si gusta o, por el contrario, los lectores lo dejan porque no engancha. Además siempre encuentras alguna sorpresa y hay algún lector que aporta algo interesante. Lo dicho, es una red social y hay de todo.
Y no me enrollo más con el tema, que tampoco soy una defensora ferviente de Wattpad, jejeje. Solo quería decir que a mí me ha ayudado a lanzarme y enseñar lo que escribo.
A todo esto no sé si era este tipo de opinión lo que buscabas, pero bueno ahí lo dejo ;P
Felicidades por el artículo.
Un saludo!!
Coincido contigo en que me interesa más la manera de contar la historia que esta en sí misma; una historia poco interesante pero bien contada, me engancha; una buena historia mal contada, me aburre. Será porque siempre he visto mucha belleza en las palabras.
Y tener un blog me parece una estupenda práctica para un escritor. A mí me cuesta mantener la constancia escribiendo novelas, sin embargo con el blog me resulta muy fácil.
¡Un post genial, como siempre! 🙂
A mí la frase que más me molesta cuando se usa mal es la de «escribe sobre lo que sabes». O sea, cuando insinúan que sólo puedes escribir acertadamente sobre algo que hayas vivido en persona. La verdad, eso no lo encuentro obligatorio. Los escritores tenemos empatía justamente para ponernos en otras cabezas y entenderlas (aunque ni siquiera estemos de acuerdo con lo que piensan).
Muy de acuerdo. Si esto fuera así, la mitad de la ciencia-ficción no existiría. ¿Cuánta gente ha estado en el espacio?
Muy bueno, Gabriella, como siempre. Lo de intertar ser original es una pérdida de tiempo. Somos una caja de resonancia y reverberamos todas las voces de aquello que leemos. Por eso no hay que preocuparse por copiar, siempre saldrá algo diferente. De hecho a mi me dijeron que imitaba muy bien. Que era capaz de imitar casi cualquier estilo y me di cuenta de que era un halago, no una crítica. Ahora cuando quiero escribir comedia, leo algo parecido antes de ponerme y me sale. Lo mismo con el drama, cyberpunk, o monólogo interior etc Incluso se pueden alternar diferentes estilos en un mismo texto dependiendo de lo que se busque. Yo creo que esa es la gran virtud. Y por lo de los filósofos gobernantes, ya lo sabíamos. Platón salió por piernas de lo mal quenlo hizo en el único intento que tuvo 😉
Jaja, justo pensaba en Siracusa conforme redactaba este artículo. Pobrecico Platón.
«Somos una caja de resonancia y reverberamos todas las voces de aquello que leemos».
Creo que todo el artículo podría resumirse en esa frase.
epa… certísimo lo del piropo, yo pensaba que era un fracaso. Gracias por decir la vedad.Gracias JAVIER
Gracias por tus artículos, que son como descargas eléctricas. A mí me ayudan a espabilar cuando me quedo estancada.
Este ha sido muy instructivo y motivacional, pero sin remilgos.
Me encantaría escribir a cuatro manos, estoy intentando embaucar a una amiga que también escribe. Tengo curiosidad por saber si podría salir algo interesante y conseguir mimetizar ambas narraciones.
Lo de leer de todo me lo estoy tomando muy enserio. De hecho antes pensaba que para escribir un género debías leer mucho de ese género y, aunque es cierto, últimamente estoy leyendo cosas de narrativa contemporánea que me están dejando una huella notable y útil para mis escritos de fantasía o CiFi.
Con respecto a Wattpad me planteé escribir alguna cosilla y subirla a la plataforma pero todavía no lo tengo muy claro por más que leo artículos favorables. Te informaré si doy el paso a ver qué sucede.
«De hecho antes pensaba que para escribir un género debías leer mucho de ese género y, aunque es cierto, últimamente estoy leyendo cosas de narrativa contemporánea que me están dejando una huella notable y útil para mis escritos de fantasía o CiFi».
No puedo estar más de acuerdo. A mí me dicen siempre eso de que tengo que leer mucho juvenil si quiero escribir juvenil. Y sí, tiene sentido, tengo que entender qué busca mi público. Pero no voy a limitarme a leer ese género (sobre todo cuando hay, como en cualquier género, tanta cosa flojita llena de clichés). Es mucho más inspirador meter referencias e influencias de obras de gran calidad, sea cual sea su sector y temática 🙂
Bueno, creo que ya me estoy tadando en leer a Umberto Eco qe tus artículos son como la publicidad de McDonald.
Bueno, tiene algunas cosillas en común con el McDonald’s. Para empezar, es difícil de digerir. Yo os doy la versión reducida y simplista 😉
Tú preguntas, yo respondo.
Wattpad es sobre todo útil para gente que empieza con la afición de escribir.
Para escritores experimentados puede aportar también, sobre todo, opiniones para valorar la efectividad de lo escrito sobre los lectores.
Si tienes la suerte de que te lea algún escritor, pues puedes también tener un lector cero de lujo.
Respecto a lo de mostrar algo pulido o no, puedes mostrarlo todo lo pulido que quieras, puedes escribir una novela, repasarla 7 veces y, entonces, puedes subirla por capítulos o entregas, o puedes directamente comenzar a escribir e ir subiendo borradores a medida que los terminas.
Esto último es un experimento cuya espontaneidad también puede enseñar mucho, para ver si la historia funciona o no e ir cambiándola.
Pero, como en todas las redes sociales, tienes que hacer un trabajo previo de, y permíteme la redundancia, socialización, para que la gente te lea.
Por si tienes más interés en el tema, hablé sobre como usar Wattpad para promocionar libros en el podcast de Ana nietoTriunfa con tu libro,
Otra cosa para la que sirve Wattpad es para decirle a una tremenda que pase por la calle: ¡Wattpad!
Y que la gente te mire más raro aún de lo que suele.
Pero no lo recomiendo.
😉
¡Saludos!
[…] Deja de buscar tu voz (y otras maneras de escribir con personalidad) […]
Muy buen artículo, Gabriella.
Mi abuelo vivía en el monte (así como el de Heidi).
Cada mañana llegaba un señor, que se llamaba Teódulo, que se ponía a cavar la tierra en una ladera detrás de casa. Ahí, trabajaba sin descanso, de sol a sol, o de neblina en neblina (era Asturias).
Al atardecer, se quitaba la ropa de faena en un cobertizo, y se aseaba en la fuente, mientras charlaba un poco con mi abuelo que le solía preguntar, por pura cortesía, si hoy había tenido suerte. El hombre negaba con la cabeza y se marchaba, algo cabizbajo y derrengado, despidiéndose con un «hasta mañana».
Al día siguiente, volvía. A pesar de la lluvia o de la niebla, Teódulo siempre volvía. Se cambiaba en el cobertizo, calzaba sus katiuskas, agarraba el pico y la pala, y a cavar como un poseso. Ni siquiera sé si paraba para comer, nunca lo vi, aunque supongo que traería un bocado. Desaparecía dentro del hoyo, cada vez más profundo, ya gigantesco, y cavaba.
Un día, alguien debió de dar parte y las autoridades intervinieron; tuvo que dejar el hoyo, con gran pesar.
Y ¿qué buscaba Teódulo? Teódulo buscaba oro, y estaba convencido de que lo encontraría en ese preciso lugar. Nunca sabremos si lo habría encontrado de no haber sido interrumpido…
Yo, buscando mi voz, algunas veces me siento como él, obsesionada y tenaz, buscando una voz que no sé si algún día encontraré, ¿y si al final resulta que soy muda?
Entretanto, leo, escribo, corrijo y carraspeo.
Un saludo.
Hacía mucho que no pasaba por acá. Me gusta mucho que nos des consejos que sean más que esas frases abstractas de «todo saldrá bien porque tiene que salir». Es verdad, para escribir primero hay que leer mucho y variado. El blog me ha dado mucha práctica y, aunque lo tengo abandonado últimamente, me ha abierto horizontes en la narración que no hubiera explorado de otra manera. Yo soy de las grandes traumadas en esa búsqueda de la voz propia. Confieso que no estoy segura de cómo será.
Wattpad también me genera contradicción. Creo que es una cuestión generacional, yo soy más de la época de Fanfiction.net y Fictionpress, o de los foros con historias escritas en comentarios con usuario, estado de ánimo y banner bonito debajo. Igual publico mis cosas allá y tengo mis autores favoritos (que serán tres, como mucho, lo mismo que mis lectores).
Buen post, me lo llevo al muro de facebook para recomendarlo 😉
¡Saludos!
Hola, Gabriella.
Muy buen artículo. Me gusta tu forma de deconstruir muchos tópicos que rondan en la escritura. Todos, llenos de un optimismo que tira a lo sencillo, como una manera de decir «no te desanimes», pero nunca te dicen «cómo» no hacerlo.
Sobre el asunto de la voz propia he llegado a leer cosas tales como que la corrección de un texto anula la voz. Que los grandes escritores no corregían sus textos (supongo que no, porque pensaban mil horas antes de poner la pluma sobre el papel). Muchas veces se nota una cierta conducta a apostar por lo espontáneo, a romper las reglas sin conocerlas como bien dijiste.
Mucho de esto se resume, a mi parecer, en una cosa sencilla: la escritura es un proceso largo, complejo y a veces inconsciente, y resulta tan difícil ponerlo en palabras, que es más simple ir a la frase prefabricada.
Por cierto, me encantó la comparación de la literatura y la música, muy poética, y muy cierta.
¡Un saludo!
Hola Gabriela. He estado leyendo algunos de tus artículos y me gusta el tono pragmático que adoptas; por fin alguien conduce de forma correcta a los aspirantes a escritores.
Sinceramente he leído cosas en páginas donde enseñan a escribir, que me han dado risa. Pretender que la gente escriba bien a base de recetas es ridículo. Quizás sirva para escribir felicitaciones por navidad y ese tipo de cosas; detalles para quedar bien en familia, como la pequeña tocando el piano. Pero de verdad que prometer los secretos de la escritura profesional, mediante talleres que se basan en la inspiración de otros y no de los propios alumnos es un sinsentido.
Porque no se trata de escribir emulando a nadie, se trata de escribir cosas únicas, auténticas y eso no sale fijándose en como lo hizo otro, sale haciéndolo a nuestra manera. Es cierto que hay que tener una buena base y fundamentos técnicos, leyendo de forma técnica (como bien decías en otro artículo), podemos destripar estructuras y planteamientos y luego aplicar los que mejor se adapten al tema del escrito (mejor si se hace de forma inconsciente ese acceso a la información).
Un saludo y buen blog!
No sé si hay forma de conducir (correcta o incorrectamente) a los escritores, pero gracias 😀
Creo que este blog es genial y muy útil, siempre he querido escribir algo, pero no se si realmente tengo lo necesario o solo es una ilusión, de todos modos estoy en etapa investigativa, asi que gracias y si tienes algún consejo de como empezar lo agradezco. Saludos desde Nicaragua.
Hola, Marvin, y gracias por tus amables palabras.
Todo el blog está lleno de información sobre lo que preguntas, pero te animo a leer sobre todo este artículo: https://www.gabriellaliteraria.com/escrito-un-libro/
Hola Gabriella, sólo decirte que agradezco mucho tu blog. Tomo nota de cada uno de los recortes porque aprendo un montón con ellos. Me gustaría decir «en los libros que ya he escrito» o «mis personajes suelen ser» o algo parecido, pero nada, estoy recién empezando. Aunque con mis cuentos me ha ido bien, hay que decirlo. Y pese a que llevo meses leyendote, recién ahora me animé a escribir, básicamente por una duda. Mencionaste a Agatha Christie y hace unos meses escuché a dos señoritas, muy pirulas ellas, con doctorados en lenguas comparadas de distintas universidades y esas cosas, y decían que Agatha Christie no es literatura…. entonces, qué es?
Un abrazo inmenso desde Chile
¡Hola, Tatiana!
Sospecho que esas dos señoritas no han salido mucho de sus universidades. Recuerdo a compañeros míos de la facultad que decían que Tolkien era «subliteratura». El ambiente de facultades y pasillos puede ser a veces como llevar esas anteojeras que les ponen a los caballos: va muy bien para enfocar tu atención en lo tuyo, pero a veces no es tan útil a la hora de entender lo que pasa fuera de esas paredes. Yo tuve la suerte de trabajar con personas en zonas no privilegiadas (y de conocer a otros que hacían gestión cultural en ese tipo de entornos), y me di cuenta del tremendo esnobismo literario que arrastraba por mi propia experiencia personal y académica. Y con los años, gracias a este blog y a mi trabajo en el sector editorial, he conocido a cientos de lectores y escritores que me han ayudado a cambiar aún más mi percepción. Y aun así soy consciente de que me quedan muchos prejuicios y tonterías por superar.
Mucho de lo que consideramos hoy en día obra clásica literaria fue, en su momento, tan popular, comercial y mainstream como Agatha Christie en nuestros días. Shakespeare, sin ir más lejos, tenía que crear lo que el vulgo quería ver, porque si no, nadie iba a ver sus obras (e imagino que lo mismo podría decirse de Lope de Vega). El tío plagiaba y metía chanzas soeces por doquier, y a todos eso nos parece fenomenal. No lo estoy comparando con Christie, pero lo comento porque tenemos una idea curiosa acerca de lo comercial y popular como algo que siempre es negativo. Shakespeare fue revolucionario para la lengua inglesa y para los creadores que lo siguieron, pero Christie, a su manera, también marcó un género (¡y a una generación!).
Hay mucho debate sobre qué convierte a un texto en literario, pero en sus definiciones más básicas, lo literario depende de la intencionalidad y de la recepción del lector y su sociedad, no necesariamente de lo que podamos concebir como calidad o transcendencia. Esto es algo muy muy básico que se enseña en primero de carrera (asumiendo que haya alguna asignatura de teoría literaria), pero que rara vez se asimila desde la perspectiva práctica del estudiante.
Otra cosa distinta es que ese comentario sobre Agatha Christie viniera a cuento por el contexto de la conversación, que desconozco cuál era.
Gracias por pasarte y comentar 🙂
[…] a otros? ¿Cuántos blogueros conocéis con un tono solo suyo, que reconozcáis de inmediato? La voz no se hace en un día y es cierto que aprendemos imitando lo que nos gusta y que somos un cúmulo de influencias, pero si […]
[…] una tríada de artículos. El primero de Fany Álvarez (aquí), este otro de Gabriella Campbell (aquí) y complemento con Néstor Belda (aquí). Sé que te serán de mucha ayuda en adelante, y mientras […]
[…] escritura surge de un mar de influencias. Si no estás consumiendo material creativo, es mucho más difícil que produzcas algo en […]