Es jueves. Comienza a olerse el dulce aroma del fin de semana. Mi pelea eterna con la lista de tareas y desafíos personales otea un pequeño remanso de paz y descanso allende las montañas del esfuerzo, en un plácido valle de reposo, maratones de series y cerveza. Y tal.
Y, como es jueves, llega el día de la entrevista relámpago.Hoy le toca a María Zaragoza.
¿Qué era esto de las entrevistas relámpago? Tengo una lista muy larga de preguntas cortas (ahora mismo va por 94 preguntas y subiendo). De allí, usando random.org, selecciono una secuencia de quince preguntas aleatorias, que le entrego al entrevistado o entrevistada. Este (o esta) elige diez de esas preguntas y responde con frases también breves. Al final, hay una pregunta extra que podrá aprovechar para hablar un poco más de sí mismo/a o para vengarse de la entrevistadora (es lo justo). La semana pasada entrevisté a Javier Martos y podéis ver todas las entrevistas publicadas hasta ahora en este enlace. Y ahora, vamos a hablar un poco de la entrevistada de hoy:
María Zaragoza es autora del libro de relatos Ensayos sobre un personaje incompleto (Tau 2000), la autoficción Amores que matan (Tau 2001), la colección de novelas cortas Realidades de humo (Belacqva, la otra orilla 2007) llevada al cine en México por Jacko Loustaunau, el cómic Cuna de cuervos junto al dibujante Didac Pla (Parramón 2009) y las novelas Tiempos gemelos (Belcqva, la otra orilla, 2008), Dicen que estás muerta (Premio Ateneo joven de Sevilla 2010, Algaida), Los alemanes se vuelan la cabeza por amor (Premio Ateneo Ciudad de Valladolid 2011, Algaida) y Avenida de la Luz (Minotauro, 2015) así como la nouvelle basada libremente en el cuento “Barbazul” Constanza Barbazul (Sigueleyendo, 2011). Ha participado en numerosas antologías con sus relatos, entre las que destacan Némesis (Sportula 2012), Última temporada (Lengua de Trapo 2013) y Piedad y deseo (Imagine, colección Hijos de Mary Shelley, 2014). Es becaria de la tercera promoción de la Fundación Antonio Gala.
Conocí a María en una cena en el festival Celsius. No recuerdo demasiado de esa cena, creo que estaba agotada del día de presentaciones, firmas, comilonas y sociabilidad que llevaba, pero recuerdo a María, que se hizo con la atención de todos los comensales narrando una historia muy real y muy tragicómica. También recuerdo que la comida era mediocre. Sí, creo que fue la única vez en el festival Celsius en el que no comimos como reyes. Pero tuvimos entretenimiento con nuestra cuentacuentos particular, así que a quién le importa.
ENTREVISTA relámpago A María zaragoza
1. ¿Escribes de noche o de día?
Ahora de día, me ha cambiado el biorritmo, antes siempre de noche.
2. ¿Cuál fue el último libro que te dejó resaca lectora?
Creo que El tambor de hojalata.
3. ¿Qué libro le recomiendas a gente a la que no le gusta leer?
Harry Potter, seguro.
4. ¿Por cuánto dinero te venderías?
Soy demasiado ambiciosa para venderme por dinero, me tendrían que ofrecer algo más atractivo.
5. ¿Con qué tres adjetivos te describiría tu mejor amigo/a?
Sensata, trabajadora, persistente.
6. ¿A qué escritor, vivo o muerto, retarías a duelo de espada en un molino al amanecer?
Seguro que sería divertido con Fernando Arrabal.
7. No puedo vivir sin…
Escribir.
8. ¿Qué es lo que más te ha costado escribir?
Algunas muertes de personajes a los que había cogido cariño.
9. ¿Cuál es tu gran punto débil como escritora?
La novela histórica
10.¿Qué haces cuando te atascas escribiendo?
Es mejor dejarlo y esperar a que el atasco se pase solo.
Pregunta extra (seleccionar opción y contestar):
a) El entrevistado se inventa una pregunta, la hace y se responde a sí mismo.
b) La pregunta la hace el entrevistado a la entrevistadora.
c) Ya he terminado, deja que me vaya a mi casa. Por favor.
María elige la b) y me pregunta: ¿Cuál ha sido la respuesta más sorprendente que te ha dado un autor?
No sé si es la más sorprendente, pero es la primera que me viene a la cabeza. En la entrevista que le tocó a Juande Garduño, dijo que había hecho una vez de negro para otro escritor. Me resultó sorprendente no por el hecho de que hubiera hecho de negro (es algo mucho más frecuente entre autores de lo que se podría pensar), sino porque lo decía claramente, en un medio público. Siempre ha sido algo que los escritores han comentado entre ellos, pero no tanto ante los lectores.
También me está sorprendiendo, en general, la cantidad de escritores que dicen que no beben. Tenemos esa imagen cultural del autor borracho y bohemio, pero se ve que para muchos la disciplina implica no dejarse llevar por el alcohol y otras tentaciones.
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Muchas gracias a María por sus respuestas. ¡No os perdáis la entrevista del jueves que viene!
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